Separemos la paja del trigo.
Es común la idea de que la Biblia prohíbe todo tipo de juicio. Esta forma de pensar ha movido a muchos a pasar por alto el pecado o a vivir una vida licenciosa sobre la base de que nadie puede juzgarlos. Les gusta citar de la Biblia; "NO JUZGUÉIS", sin investigar primero en qué circunstancias y a que gente Jesús dijo estas palabras, y más importante aún, si esto significa que el cristiano no puede ejercer ningún tipo de juicio. Pero todo cristiano maduro debe hacerse la pregunta: ¿Realmente la Palabra de Dios dice que es pecado juzgar?
Juzgar y condenar, ¿será lo mismo?
Hay que tener en cuenta que existen diferentes tipos de juicios. Lo sabemos porque el mismo Señor Jesús dijo:
No juzguéis según las apariencias, sino juzgad con justo juicio.
Juan 7:24 Reina-Valera 1960.
Esto dijo el Señor porque los judíos se airaron en su contra porque él sanó a un hombre el día de reposo. Es evidente que para ellos era más importante su legalismo férreo que la misericordia, lo cual era el objeto principal de la ley de Dios. Aquí vemos claramente que JUZGAR no es pecado, siempre y cuando se haga de manera justa.
El juicio injusto, el cual el Señor condena, lo vemos expresado en esta otra cita:
No juzguéis, y no seréis juzgados; no condenéis, y no seréis condenados; perdonad, y seréis perdonados.
Lucas 6:37 Reina-Valera 1960.
En este pasaje, el mismo contexto da a entender que la
palabra JUZGAR es sinónima de CONDENAR, cosa que ningún ser humano puede hacer, porque no somos Dios. Cuando condenamos a otro ser humano, nos condenamos a nosotros mismos porque todos somos pecadores y dignos del justo juicio de Dios, nos merecemos el infierno.
...por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios...
Romanos 3:23 Reina-Valera 1960.
Veamos entonces, qué juicios manda la Biblia.
La Palabra de Dios nos manda a juzgar, en el sentido de hacer diferencia entre lo bueno y lo malo, entre lo santo y lo impuro, como dice la Escritura:
Sus sacerdotes violaron mi ley, y contaminaron mis santuarios; entre lo santo y lo profano no hicieron diferencia, ni distinguieron entre inmundo y limpio; y de mis días de reposo apartaron sus ojos, y yo he sido profanado en medio de ellos.
Ezequiel 22:26 Reina-Valera 1960.
También la Biblia nos manda a discernir, juzgando toda enseñanza que no se ajuste a la SANAS PALABRAS, 1 Timoteo 6:3, es decir a la forma de doctrina que recibimos de parte de Cristo y que nos fue transmitida por medios de los apóstoles. Es lo que conocemos como doctrina apostólica.
Amados, no creáis a todo espíritu, sino probad los espíritus si son de Dios; porque muchos falsos profetas han salido por el mundo.
1 Juan 4:1 Reina-Valera 1960
Si alguno viene a vosotros, y no trae esta doctrina, no lo recibáis en casa, ni le digáis: !!Bienvenido!
2 Juan 1:10 Reina-Valera 1960
La Escritura manda a la iglesia a juzgar a los hermanos que andan en pecado o de manera desordenada en la iglesia o en medio de los incrédulos, dando mal testimonio del nombre de Dios. Esto deben hacerlo los pastores en conjunto con la congregación.
Más bien les escribí que no se junten con los que se dicen hermanos pero son libertinos, avaros, idólatras, insolentes, borrachos y ladrones. Con esa gente, ni siquiera coman juntos.¿Con qué derecho podría yo juzgar a los de afuera, si ustedes no juzgan a los de adentro?
1 Corintios 5:11-12 Reina Valera Contemporánea
Saca la viga de tu ojo, y luego la paja de tu hermano.
Muchos abusan del verso No juzguéis, para que no seáis juzgados, del capitulo 7 de Mateo, sin tomarse la molestia de leer todo el capitulo y ver el contexto. Aquí el Maestro no está diciendo que no debamos corregir al hermano, está diciendo que nos revisemos a nosotros mismos primero, considerando que somos humanos y también podemos caer o estar en un pecado igual o peor que el que estamos corrigiendo, y que al hacerlo lo hagamos en mansedumbre y con amor.
El juicio con el que no debemos juzgar al hermano es el juicio de condenación. Pero si debemos usar de justo juicio para guiar al hermano de su pecado a los pies de Cristo.
!Hipócrita! saca primero la viga de tu propio ojo, y entonces verás bien para sacar la paja del ojo de tu hermano.
Mateo 7:5 Reina-Valera 1960
Por último, recomendamos como dice Pablo: examinarlo todo y retened lo bueno, comparando todo lo que oigamos predicar o enseñar a la luz de las Escrituras, haciendo como los hermanos de Berea:
...pues recibieron la palabra con mucha atención, y todos los días examinaban las Escrituras para ver si era cierto lo que se les anunciaba.
Hechos 17:11Reina Valera Contemporánea
Pedro enseña que la Palabra de Dios es la única y verdadera profecía a la cual debe hacer caso la iglesia, 2 Pedro 1:19, y Pablo dice que cuando es predicada los hermanos JUZGUEN... es decir que ejerzan discernimiento espiritual conforme a la misma Biblia para verificar si lo que se predica es la verdad o el error.
Asimismo, los profetas hablen dos o tres, y los demás juzguen.
1 Corintios 14:29 Reina-Valera 1960
COMPARTE ESTA PUBLICACIÓN EN TUS REDES SOCIALES, Y DEJA TU COMENTARIO...
Exelente
ResponderBorrar